Vamos en el coche camino de teatro, cuando de repente, obras en el camino, la calle cortada y hay que cambiar de ruta para llegar. No importa que sea más corto o más largo el camino, pero llegar se llega.
Eso sí aparcamiento muy cerquita, el karma nos recompensa.
Vídeo promocional improvisado muy de su estilo.
Entramos por aquellas puertas del teatro y ya es un no parar, escaleras arriba y escaleras abajo, atrezzo para allá atrezzo para acá, todo listo y preparado.
Se cierra el telón, respiramos profundo, y de nuevo se abre con una historia que contar.
Esa música nos invade cada recoveco de nuestro cuerpo, nos hace vibrar y emocionarnos, como con cada palabra y movimiento.
Abrazos y más que faltaron, siempre son pocos los abrazos.
Horas después todo terminado, con sus más y menos, pero con las mismas fuerzas, las mismas ganas de comernos el escenario y continuar mañana.
Eso sí aparcamiento muy cerquita, el karma nos recompensa.
Vídeo promocional improvisado muy de su estilo.
Entramos por aquellas puertas del teatro y ya es un no parar, escaleras arriba y escaleras abajo, atrezzo para allá atrezzo para acá, todo listo y preparado.
Se cierra el telón, respiramos profundo, y de nuevo se abre con una historia que contar.
Esa música nos invade cada recoveco de nuestro cuerpo, nos hace vibrar y emocionarnos, como con cada palabra y movimiento.
Abrazos y más que faltaron, siempre son pocos los abrazos.
Horas después todo terminado, con sus más y menos, pero con las mismas fuerzas, las mismas ganas de comernos el escenario y continuar mañana.
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